Para conmemorar uno de los últimos actos de celebración he elegido un lugar emblemático y con carisma como es la Fonda Europa de Granollers. Una buena cena con unos amigos para hablar de lo sucedido y del panorama actual.
Ha sido una cena de aquellas largas, con mucha conversación, risas y anécdotas.
Nos sentamos a las 9 de la noche y no nos levantamos hasta las 3 de la madrugada, como también es un hotel simplemente nos cobran y nos dejan allí, que la puerta está abierta toda la noche.
El menú fantástico, como siempre en la cocina de la Fonda. Cava de la casa para regar la comida.
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