Markáris es uno del mis autores favoritos de novela negra y ya hace unos años nos había dejado colgados este buen hombre sin escribir nada más del comisario Jaritos, Kostas Jaritos. ¿Casualidades?
En el accinista mayoritario se mezclan dos casos qué en principio no tienen nada a ver, primero un asesino en serie que va ajusticiando a trabajadores relacionados con el mundo publicitario y por otro lado el secuestro de un transbordadores de aquéllos que hacen rutas entre las islas griegas con tan mala leche que adentro viaja la hija del comisario.
Pero en este mundo todas las cosas están relacionadas y los dos dolores de cabeza de Jaritos también. En este libro el autor intenta decir que el terrorismo puede tomar las formas más diferentes y venir de los lugares y autores más diversos.Markáris tiene unas lecturas fantásticas para pasearse por las calles de Atenas, sus periplos en coche por sus congestionadas calles huelen a humo y a gasolina quemada que contrastan con lugares fantásticos y tranquilos.
En el accinista mayoritario se mezclan dos casos qué en principio no tienen nada a ver, primero un asesino en serie que va ajusticiando a trabajadores relacionados con el mundo publicitario y por otro lado el secuestro de un transbordadores de aquéllos que hacen rutas entre las islas griegas con tan mala leche que adentro viaja la hija del comisario.
Pero en este mundo todas las cosas están relacionadas y los dos dolores de cabeza de Jaritos también. En este libro el autor intenta decir que el terrorismo puede tomar las formas más diferentes y venir de los lugares y autores más diversos.Markáris tiene unas lecturas fantásticas para pasearse por las calles de Atenas, sus periplos en coche por sus congestionadas calles huelen a humo y a gasolina quemada que contrastan con lugares fantásticos y tranquilos.
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